Uno de los casos más controversiales que tuvo lugar en la ciudad de Ma cas es el caso Hidroabanico, un conflicto socio-ambiental entre una hidroeléctrica privada y una comunidad a 12 kilómetros de Macas, su nombre Jimbitono.
Todo ocurrió en el año 2006 y a mediados del mes de agosto se revienta una válvula de desfogue de agua, cuyo colapso significó la inundación de varias hectáreas colindantes con las quebradas Balaquepe y Lupique. A partir de esta coyuntura se desataría una controversia debido a la serie de procesos poco participativos previos a la instalación del proyecto de generación de 37 megavatios de energía eléctrica al filo del agua, de la cual 28 serían para el proyecto Mirador regentado por la compañía CORRIENTE RESOURCES (Ecuacorriente o mejor conocida como ECSA) para la explotación de minería a cielo abierto.
Ambos proyectos se mantuvieron ocultos pero el colapso de la válvula en las cercanías de Jimbitono hizo que se destape este proyecto de compra-venta de energía entre Hidroabanico y Ecuacorriente, en el cual la segunda invertiría 10 millones de dólares para la construcción de la línea de transmisión desde Macas hasta Tundayme, al costo de 5 centavos el kilovatio/hora. De la riqueza que se generaría de ambos proyectos poco participó la población y permitió que se ponga en tela de discusión la forma en que se realizan las concesiones de agua y suelo para actividades extractivas por parte del Estado ecuatoriano.
Esto es una introducción...
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